Rutas de los lectores

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La primera ruta que nos manda Julotano. Tambien podeis verla publicada en el blog que esta empezando: Cyclotano

 

 

Del nacimiento del Rin a Basilea

 

 

por Julotano       26.01.2014

 

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Suiza posee un sistema envidiable en lo que se refiere al ocio en el desplazamiento. A este sistema le llaman "SuisseMobile". Integra toda una red de pistas y senderos que conciernen al senderismo, el ciclismo todo terreno, el patinaje y el ciclismo clásico o de carretera. A su vez los recorridos pueden ser de caracter regional o cantonal y Nacional.

 

 

Desplome del Rin en Shafhausen. De un costado, Alemania, del otro Suiza. El islote, suizo por la bandera.

 

La que nos sedujo fue la Ruta Nacional 2, que va desde el nacimiento del Rin, siguiendo su curso, hasta la ciudad de Basilea, donde confluyen las  fronteras de tres países: Suiza, Alemania y Francia.

 

 

 

No tenemos el track de Julotano, asi que hemos usado para el mapa una "aproximacion"

 

 

 

La ruta

 

La elección de la ruta tiene mucho que ver con la cuenca de un gran río. Nosotros podemos hacer grandes distancias sobre llano e incluso pequeños desniveles, pero nos están vedados los puertos o grandes pocentajes en subida. Nos veríamos obligados a echar pie a tierra y arrastrar una considerable carga. En este caso, salvado el puerto que asciende a los 2.000 m. donde nace el Rin en un práctico tren de cremallera, lo demás es dejarse llevar siguiendo su trayectoria, salvo algunas colinas.

 

 

 

Clima

 

El tiempo que tuvimos en Agosto fue extraordinario. Solo nos llovió una tarde y parte de la noche. La que acampamos en Chur donde tuvimos que montar la tienda bajo la fina lluvia   Al día siguiente volvía a resplandecer el sol. Atuendo de pleno verano.   Supongo que no será facil encontrar en Suiza dos semanas seguidas así...

 

 

 

Orientacion

 

 

En algunas oficinas de Turismo de los pequeños pueblos no encontramos la guía oficial de viaje de Suisse Mobile, pero no fue ningún obstáculo ya que la señalizacíon es extraordinaria, como podeis observar en la foto:   Hay que decir que vienen señaladas las estaciones de ferrocarril a las que puede acudir el excursionista que decide volver a su punto de origen. En este caso se ve Reichenau (Pequeña locomotora) 1 km.

 

 

Etapa 1: de Sedrun a Chur (70 km)

 

Tras no pocos avatares y pequeñas carreras contrareloj, llegamos a nuestro destino: Sedrun, un pequeño pueblo del valle del incipiente  Rin. Llegamos desde Ginebra tras dos transbordos. Es estresante cambiar de tren cuando tienes un reducido margen de minutos. Las pequeñas estaciones no disponen de escaleras mecánicas... y hay que trasladar ese enorme artilugio que es un tandem y todo el resto del equipaje, que va en un solo bulto, una gran bolsa. Atrás queda la noche pasada en un expreso de coches cama y un pequeño tentempié, pero al fin estamos en el lugar de partida.

 

Alojamiento en "TSGA HEINRICA", típica casa alpina con fachada y balconadas de madera llenas de flores. Bed and brekfast por 40 €. Desayuno en la enorme cocina de la casa de una abundancia digna de reseñar.

 

		Le pregunto a la señora de la casa cómo se saluda por la mañana en "Romanche", dialecto que se habla  aquí: Me responde que "Buen di". Me llamó poderosmanete la atención durante el pequeño paseo que dimos por el pueblo el que las sentencias bíblicas que suelen pintar en las casas germánicas, junto con frescos de alegorías religiosas, no estaban en alemán y eran más o menos inteligibles para nosotros. Muchas palabras tenían raíces latinas, mejor aún del "romance", lengua de transición del latín a nuestro actual castellano.
TSGA HEINRICA

 

 

No sé cómo pudieron llegar estas influencias a un valle como éste.

 

Por fin salimos sobre las 9 de la mañana. Magnífica carretera y sobre todo en descenso. Llegamos a Ilanz donde se anuncia una subida. Esta se prolonga más de lo esperado pero merece la pena descubrir Frimms, pueblo precioso acostado en una ladera con un dosel de roca caliza. Aprovechamos para comer en un banco observando el panorama.

 

 

Pequeña estación de ferrocarril de Sedrun

 

Por la tarde se pone a llover y bajo la lluvia llegamos a Chur tras una gran bajada con carretera mojada y tráfico.

El camping está a las afueras del pueblo. Nos instalamos en medio de la lluvia que no cesará hasta primeras horas de la madrugada.

Hacemos una cena de circunstancias con los pertrechos de talego que llevamos y a descansar para una nueva jornada.

 

 

 

Etapa 2: de Chur a Älstetten (Kriessern) (101 km)

 

 

Madrugamos un poco. Ha dejado de llover pero todo está con esa humedad matinal que todo lo impregna. No nos queda otra que recoger todo tal como está y tras un buen desayuno salir hacia las 9 de una mañana soleada y que promete. Las montañas van perdiendo altura y aparecen las primeras llanuras ondulantes con viñedos. Las uvas comienzan a "enverar" ó cambiar de color.

 

 

Llanuras de la cuenca del Rin

 

Por la tarde llegamos sin novedad a Älstetten, pero no hay camping. Decidimos seguir hasta Kriessern donde hay uno, pero está completo. No nos permiten quedarnos a pesar del poco espacio que necesitamos, pero hay que entender la idiosincrasia de algunos campings de por aquí. Son espacios muy cuidados de limpieza, jardinería, etc. y los ocupa gente más o menos fija con caravanas ó en bungalows, y allí no quieren trashumantes.
En el pueblo unos lugareños nos ofrecen habitación en su casa si en el pequeño hotel del pueblo no hay habitación. La tarde avanza y es de agradecer... pero tenemos habitación en el hotel. Buena cena en la terraza y pequeño paseo.

 

 

Etapa 3: de Älstetten (Kriessern) a Stein am Rhein (96 km)

 

 

La cena de terraza del día anterior con vino nos ha hecho reponer fuerzas. Un buen desayuno suizo nos pone definitivamente a tope. Al salir del pueblo dos señores en bici nos orientan y acompañan durante un buen rato. Pronto se vislumbra el Bodensee (Lago Constanza).

Aunque lo vamos viendo, no es hasta Arbon y después Romanchorn que no nos paramos a ver el panorama del lago. Sorprende por su vastedad, por la cantidad de barcos a vela y por los muchos pequeños puertos. Nos sorprende también muy gratamente un concurso de esculturas de arena.

 

Este dragon de arena terminara vomitando fuego ...		No es el mar ... es el Bodensee y Mila

 

Paramos a comer en Münsterlingen junto al lago. Un buen banco a la sombra es suficiente es suficiente para sentirse los reyes del mundo, con un menú variado y hasta ensalada. A continuación tomamos perezosamente el sol sobre la hierba. Me gustan más estas playas que las de arena. Me pregunto cómo van a tostarse al Mediterráneo teniendo lo que tienen aquí, pero creo que la respuesta es que no todos los días son como hoy durante el verano...

 

 

 

¿que mas se puede pedir?

 

 

 

Etapa 4: de Stein am Rhein a Flaach (56 km)

 

 

La visita matinal es sobresaliente. Stain está en total calma y sin gente.

 

 

		El día es soberbio de sol y color.   El centro histórico, casi todo el pueblo, es sobresaliente. Tiene todos los elementos de la región alemana de Baden-Würtenberg, predominando las casas con artesonados de madera y sus frescos, muchos de ellos con referencia a la predicación del protestantismo por Calvino y otros.   Seguimos nuestra ruta y vemos algo realmente curioso: Grupos de bañistas descienden a favor de corriente por el centro del río en plena conversación, sobre todo las señoras.
Fresco alusivo a la predicación protestante

Nuestra ruta pasa por Shafhausen, donde el río se desploma en un desnivel no muy grande, unos veintitantos metros, pero lo suficiente para que el fragor de las aguas impresione. Todos los turistas del mundo pasan por allí. Hay un islote central al que se accede en pequeños barcos, en medio del "polvo" de agua. 
Seguimos por la tarde hasta llegar al camping de Flaach, pequeña población junto al Rin. Nos emplazan justo en la orilla y para cuando nos damos cuenta los mosquitos nos fríen literalmente.

 

 

 

Camping de Flaach, donde los mosquitos muerden

 

 

Etapa 5: de Flaach a Möhlin (91 km)

 

 

Salimos muy temprano, sobre las siete de la mañana. De nuevo un día excelente que invita a dar pedales. Vamos prácticamente junto al río, y paralelos a la vía verde van el ferrocarril y la carretera. 

 

 

 

 

Paramos a comer en un pequeño restaurante con menú del día de cuatro platos: Sopa, carne estofada con muy buena guarnición, ensalada y de postre helado casero. Precio muy razonable. Seguimos viaje y al llegar a Wallach preguntamos a un chico que pasea con un carrito de bebé si hay camping en el pueblo. Este suizo resulta ser descendiente de valencianos y se alegra mucho de poder charlar en castellano.  Debemos seguir hasta el siguiente pueblo, Möhlin, tras cruzar por la magnífica vía verde por medio de un hayedo. Compramos en el Super del pueblo y preparamos una buena cena que nos hace reponer fuerzas.

 

 

 

Etapa 6: de Möhlin a Basilea (30 km)

 

 

 

		Decidimos ir con Jean-Noël y Valentine (Padre e hija), a los que conocimos en Flaach. Nos sugieren instalarnos en un pueblecito francés junto a Basilea al que los franceses llaman Huninge (Huningen), ya en Alsacia. Aquí convergen las fronteras de Suiza, Alemania y Francia.   En un mismo día compramos en un super alemán, del otro lado del río, comemos en Francia y por la tarde visitamos el casco antiguo de Basilea en Suiza.
Jean Noël y Valentine en las calles de Basilea

 

 

Por cierto que asistimos a un inesperado concierto de trombones y trompas desde lo alto de la torre de la catedral. Suena espléndido. Visitamos el interior de la catedral cuando da comienzo un acto religioso protestante en honor de la Virgen. Es 15 de Agosto. Un gran coro ameniza el acto, que resulta de gran brillantez acompañado del órgano. Aprovechamos para ir a la estación a coger billetes para Ginebra. A la vuelta nos cruzamos con un tandem que nos hace señales de parar. Son un matrimonio mayor que parecen muy distinguidos. Nos proponen visitar algunos lugares de Ginebra. Aceptamos, aunue no andamos muy bien de tiempo. Estos guias inesperados nos muestran cosas muy interesantes. Se despiden como los señores Tissot. Los relojeros...quizá?

Por la noche nos despedimos de nuestros amigos franceses. Al día siguiente debemos de estar en la estación de Basilea a las 6 de la mañana. Aquí termina este periplo en bicicleta.

 

 

 

El Rin a su paso por Basilea

 

 

Según vemos en algunas señales  en la propia ciudad, aquí hay enlace con la Veloroute 6 Europea, que va de St. Nazaire (Nantes) al Mar Negro.

 

 

 

 

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